La desaparición del Vuelo 19.

El 5 de diciembre de 1945 partían desde la base de Fort Lauderdale en Florida (USA) 5 bombarderos modelo TBM Avenger de la Marina de los Estados Unidos en vuelo de prácticas dirección Las Bahamas. Con un cielo tranquilo pero con mar algo agitada el escuadrón conocido como Vuelo 19 perdió comunicación con la torre de control presumiblemente a medio camino de vuelta en circunstancias aún por resolver. Es en ese momento cuando la extraña desaparición del Vuelo 19 entra en la historia del misterio debido al lugar concreto donde sucedió.


Tras unas horas de vuelo deshorientados los pilotos a través del Teniente Instructor de vuelo deciden pedir ayuda por radio para lograr orientarse: “No puedo ver tierra, parece que estamos fuera de rumbo”. Los escasos instrumentos de navegación con los que se contaba en aquella época al parecer empezaron a volverse locos e incluso la radio comenzó a recibir interferencias que complicaban la fluida comunicación con el Vuelo 19. A medida que pasaba el tiempo en el escuadrón se crispaban los ánimos al ver que el propio Teniente instructor pilotaba perdido. “Si voláramos hacia el oeste, volveríamos a casa” espetó por radio uno de los alumnos del Vuelo 19, unas palabras que contradecían las ordenes del Teniente Instructor que creía estar volando sobre las islas Keys. La desorientación llevó al escuadrón en prácticas a adentrarse cada vez más en el océano hasta que ya practicamente estaban al límite de capacidad de combustible.

Tras cerca de dos horas se pierde de forma definitiva el contacto con los 5 bombarderos y se decide montar un equipo de rescate. Desde la estación aérea de Banana River un hidroavión PBM-5 Martin Mariner despega hacía el lugar donde se sospecha que se pierde la pista a los bombarderos del Vuelo 19, pero 20 minutos más tarde de su despegue también se pierde contacto con el hidroavión. Las investigaciones posteriores determinaron que el hidroavión explotó en el aire, un fallo fatal que presentaban algunos modelos de ese tipo de avión. Tras la extraña tragedia de perder a los 5 bombarderos y posteriormente al hidroavión que partió en su rescate, 248 aviones y 18 embarcaciones peinaron durante días el lugar sin éxito.



Pese a que la marina investigó los accidentes nunca hubo una conclusión clara al respecto y si muchas conjeturas. Tampoco se pudo nunca rescatar ninguno de los 5 aviones perdidos ni a los pilotos. En total se perdieron 18 vidas, 5 pertenecientes a los pilotos del Vuelo 19 y 13 que viajaban en el hidroavión siniestrado cuando acudía al rescate. Tal vez lo más misterioso de ese 5 de diciembre de 1945 fue que aquella cadena de extraños accidentes y/o desapariciones se dieron justo cuando los aviones entraron en el espacio aéreo del mundialmente conocido Triángulo de las Bermudas, donde algunos pilotos que pasan aseguran haber divisado volando en varias ocasiones a los 5 bombarderos desaparecidos, como si continuaran perdidos volando sin fin por la eternidad.

Comentarios